El embarazo en la adolescencia sigue siendo un grave problema en el país, a pesar de los esfuerzos por abordar los derechos de las menores. Un caso reciente destaca la historia de una joven de 15 años que, casada con un hombre de 36, está a punto de dar a luz y lamenta haber tenido que interrumpir sus estudios y sueños debido a su situación.

Glenny Arno, a los 22 años y con cuatro hijos, comparte su experiencia de haber quedado embarazada a los 14 años sin recibir orientación para prevenir futuros embarazos. Ella enfrenta grandes desafíos para mantener a sus hijos mientras trabaja y vive lejos de su familia, aconsejando a las jóvenes que esperen antes de tener hijos.

El psicólogo Noel De la Rosa indica que la alta frecuencia de estos casos ha llevado a que la sociedad los perciba como normales, minimizando el impacto real en las familias y la economía. A pesar de la alta incidencia, solo aquellos familiarizados con el tema se alarman por la cantidad de casos reportados.

En 2023, se registraron más de 18,000 alumbramientos de madres adolescentes en el país, incluidos partos de niñas de tan solo 9 años. La psicóloga Ivonne Guzmán señala que los cuerpos inmaduros de estas jóvenes pueden llevar a problemas de salud mental, y aboga por una mayor psicoeducación y prevención en los centros educativos para abordar la problemática.