La guerra entre Rusia y Ucrania se ha intensificado, con Ucrania lanzando ofensivas en territorio ruso y Rusia elevando las medidas de seguridad. Mientras la OTAN construye una gran base aérea en Rumania, Rusia ha comenzado a restringir el uso de apps de citas en regiones afectadas, temiendo que Ucrania las utilice para recopilar información.

El Ministerio del Interior ruso desaconseja el uso de estas aplicaciones, especialmente en Kursk, Belgorod y Bryansk, regiones recientemente atacadas por Ucrania. Aunque apps occidentales como Tinder y Bumble ya no operan en Rusia, las autoridades temen que las apps locales puedan ser vulnerables al espionaje ucraniano.

Además de restringir apps de citas, Rusia ha prohibido a sus militares hacer streaming y recomendó no abrir enlaces desconocidos. Se teme que Ucrania esté utilizando cámaras de CCTV desprotegidas para observar movimientos estratégicos en territorio ruso.

El uso de teléfonos móviles por parte de los soldados rusos también ha generado preocupación. Casos como el ataque en Makiivka, donde se culpó al uso de móviles por la muerte de soldados rusos, han llevado al parlamento ruso a proponer penas de prisión para los militares que usen dispositivos conectados a Internet en el frente de batalla.