Las consecuencias de la desaparición de la escritura a mano: ¿qué hemos sacrificado al adoptar el teclado?

A principios de 1882, el filósofo Friedrich Nietzsche recibió una máquina llamada “esfera de escribir Mallin-Hansen”, un ingenioso dispositivo con teclas, ya que su visión se deterioraba y no podía escribir a mano. En marzo de ese año, pudo retomar la escritura gracias a este nuevo instrumento. Sin embargo, su amigo Heinrich Köselitz notó un cambio en su estilo de escritura a partir de entonces, volviéndose más conciso y telegráfico, y algunos aspectos de su filosofía se vieron afectados.

Este fenómeno, que nos recuerda la expresión “el medio es el mensaje”, podría explicarse a través de las nuevas teorías de la cognición corporeizada. La ciencia cognitiva moderna sugiere que los aspectos motores y sensoriales de nuestra conducta tienen un impacto más profundo de lo que se pensaba. Nuestra mente no es un mundo de ideas abstractas, sino que depende de nuestro cuerpo y nuestras sensaciones para comprender fenómenos que de otra manera serían incomprensibles.

Un estudio realizado hace unas décadas demostró la influencia del cuerpo en la cognición al presentar palabras con contenido positivo o negativo a participantes que debían calificarlas como “buenas” o “malas” mediante un joystick. La forma en que se movían el joystick para calificar las palabras afectaba la rapidez de sus respuestas, lo que indica una relación entre el movimiento corporal y la valoración de palabras.

La escritura manual parece tener ventajas en el aprendizaje y la memoria en comparación con la escritura en teclado. Estudios han demostrado que recordamos mejor palabras aprendidas al escribirlas a mano que al teclearlas. Además, la escritura manual implica procesos más complejos y específicos para cada letra, lo que crea huellas de memoria distintivas que facilitan la memorización y el recuerdo. También se ha observado que la mecanografía consume más recursos mentales debido a la mayor velocidad de escritura, lo que puede afectar negativamente la memorización de palabras.

El instrumento de escritura también puede influir en el proceso de composición escrita, ya que la velocidad de transcripción puede interferir con procesos cognitivos superiores, provocando olvidos de ideas e información relevante. Varios experimentos han demostrado mejoras en las habilidades de composición escrita después de entrenar en escritura manual.

Aunque la escritura en teclado tiene sus ventajas, como textos más largos y de mejor calidad en algunos casos, es esencial reconocer la importancia de la escritura manual en la educación. La eliminación de la escritura manual en la escuela puede no ser una buena idea, ya que nuestro sistema cognitivo parece beneficiarse de la experiencia sensorial y motora que implica escribir a mano.